Siempre me han recomendado que si titulas un artículo con una pregunta y la respuesta a esta pregunta es negativa, mejor no escribir el artículo. Sin embargo, dado que esta entrada es una explicación larga a una afirmación que hice hace un tiempo, tendréis que aguantaros y sabed que la respuesta a la pregunta ¿Un ebook es un producto? es NO. Ahora os explico porqué. Y lo voy hacer con una enumeración de estas tan de moda:
1. No es un producto porque no puede ser apropiable. Es decir, no es posible «quitar» un ebook a alguien para darselo a otra persona. Simplemente se copia y es «el mismo»
2. No es un producto porque no es escaso… Es decir, hay stock infinito. Una vez que se dispone de la obra y se le da formato, se pueden vender o regalar tantos ejemplares como se quiera. Calcular los costes de producción de un ebook es fijo, no depende del número de ejemplares vendidos.
3. No es un producto porque no se degrada, no se avería, ni se puede considerar «de segunda mano». Los bytes copiados son exactamente iguales que los originales.
Si estas razones no son suficientes, tengo más… Pero la conclusión inevitable es que, obviamente, hay que tratar la venta de ebooks como una manera de retribución por los servicios de haber generado ese contenido, formatearlo y ponerlo a disposición del público, pero no como un producto.