Operación Megaupload o como se acaba con internet…

internet

Hoy me vais a permitir contaros un cuento. Mi vena de escritor de ficción se secó hace años tras no conseguir terminar la novela en la que estaba enfrascado (la informática ganó la partida a las musas del hiperespacio), pero hay veces en que la realidad supera a la ficción y me pregunto si el mundo no tendrá un guionista muy retorcido.


Año 2032:

Levanté mi refresco de la mesa, ya estaba casi vacío, pero no me importaba porque llevaba tiempo caliente y el gas empezaba a molestar más que a refrescar. Levanté la vista hacia el monitor y me encontré la habitual página de login de mi proveedor de contenidos. Estaba preparando un reportaje sobre el aniversario de la operación megaupload o cómo se terminó con la internet del siglo XX y se pasó a la commernet actual y se me había cerrado la sesión sin darme cuenta. Revisé mi reloj, las 2 de la mañana…, no debería estar levantado.

Tecleé el usuario y el password que me había proporcionado la productora e introduje otra vez el dedo en el identificador de ADN. La verdad, se me van a borrar las huellas dactilares si el trasto sigue raspando para analizar la piel. Al menos este modelo era mucho menos molesto que los del año pasado, algunos hasta te pinchaban para extraer sangre.. «cosas de la seguridad» nos decían, así se evita que la gente pueda compartir cuentas personales y se ahorren pagar por los servicios de commernet. ¡siempre hay piratas por todas partes!

– Veamos… Estábamos repasando el año 2012, nos quedamos en la operación megaupload… Bien, visitaremos la base de datos de los periódicos de la época.

– Mierda, no tengo acceso completo, la productora solo ha pagado por el acceso básico, tendré que comprar una extensión para poder llegar a esa información… Bueno, se lo cargaré a la tarjeta de la empresa, ya veremos luego si me devuelven el dinero. Otra vez a meter el dedo en el dichoso aparatito… Francamente, estoy deseando que llegue el reconocimiento heurístico no intrusivo que prometen en las noticias…

– ¡Conseguido!, ya tengo acceso ¡¡por 15 minutos!! ya puedo darme prisa. me voy corriendo al frigo para sacar una lata nueva y me pongo al teclado.

– En 2012 internet era una red que conectaba a más de 1900 millones de personas con un gasto mínimo, no está mal para una población de 6700 millones… umm. Los contenidos que circulaban por internet solo eran controlados por ciertos países con regímenes totalitarios, el resto circulaba sin restricciones.. ¡increible!. El comercio electrónico y la circulación de conocimiento y cultura se disparó en un movimiento sin precedentes en la humanidad. Nunca antes un ser humano ha tenido a su disposición tanta información por el simple hecho de tener un equipo conectado a la red.

– Ese mismo año EEUU (primera potencia militar de la época) decide promulgar una ley llamada SOPA para evitar que se dañen intereses norteamericanos en el campo de la propiedad intelectual, todo ello instigado por los estudios cinematográficos y las discográficas de la época, que habían dedicado recursos inmensos en presionar a los legisladores. ¿cómo es esto posible? algo se me escapa, seguiremos mirando….

– El 18 de Enero de 2012 se produce una protesta en internet contra SOPA, el primero de los dos blackouts que dejarán sin servicios de internet a miles de millones de usuarios intentando congelar la ley… ¡leche! me quedan 5 minutos de conexión o tendré que volver a pagar… aceleremos..

– El 19 de Enero, en un movimiento coordinado e imposible desde el punto de vista de la legalidad internacional, el FBI en colaboración con otras fuerzas del orden de varios países detienen a los dueños de Megaupload, una empresa de internet dedicada a facilitar el intercambio de archivos entre particulares. Al parecer esta empresa se dedicaba a permitir que los piratas difundiesen material protegido por copyright, sobre todo de empresas norteamericanas. Los servidores también han sido desconectados de internet y, en suma, los 150 millones de usuarios de ese servicio han dejado de poder acceder al mismo.

– A partir de ese momento las empresas de internet empiezan a sufrir ataques de las fuerzas de EEUU, bien deteniendo a sus responsables o parando los servicios tras la notificación por parte de los poseedores de derechos de autor (las grandes discográficas o estudios cinematográficos). Caen una a una todas las empresas de intercambio de archivos y SOPA termina aprobándose y con ella una sección de censura global para atacar a la piratería y los piratas. Hay muchas fechas aquí, hagamos un resumen… Ya no me queda tiempo…

– Los usuarios protestan masivamente utilizando internet como campo de batalla, unos ciberterroristas bajo el apodo de Anonymous decide bloquear y eliminar las webs gubernamentales de EEUU y de los estudios y empresas relacionadas. Las protestan arrecian por twitter (una empresa de mensajería) y facebook (una red social de las de antes) y los usuarios salen a la calle apoyando movimientos creados por la crisis económica global y buscando más democracia. Medios de los distintos gobiernos reprimen con fuerza estas manifestaciones y se producen muertos en varios países. EEUU decide cerrar Twitter y Facebook temporalmente para evitar la coordinación de los distintos movimientos, sin embargo programadores de todo el mundo crean un sistema distribuido de comunicación que sustituye a twitter y facebook y que no requiere de servidores centrales (freemecom). ¡rápido! el servidor me avisa de que la conexión se me va a cerrar, adelantaremos un poco…

– En diciembre la incidencia de la piratería había disminuido aparentemente en un 90%, sin embargo freemecom había coordinado operaciones contra los estudios y las discográficas haciendo que sus ventas se viesen reducidas en un 50% y que ahora se exigiera un impuesto global para mantener los emporios del espectáculo, mientras, se distribuían por internet creaciones de grupos de usuarios que fuera de los circuitos comerciales empezaban a sustituir a los productos que generaban las majors… EEUU decide aprobar otra ley que permitirá bloquear el tráfico de freemecom y las operadoras de telecomunicaciones empiezan a sufrir las consecuencias de una internet con flujos capados. La población conectada había bajado hasta solo 800 millones y el comercio electrónico había retrocedido a niveles de 10 años atrás.

– El 2013 EEUU decide cerrar internet para todas las personas que no estén identificadas de manera legal. Es el nacimiento de commernet, inicialmente para permitir las transacciones comerciales seguras, pero con el filtrado de mensajes y la monitorización de las comunicaciones como segundo objetivo. Freemecom deja de funcionar. La infraestructura de internet deja de ser libre y queda bajo el control de una sección internacional llamada earthlink. La última empresa en caer es Google, que ya no tiene cabida en el esquema nuevo de commernet y deja, en su caída, millones de usuarios sin servicios. internet ha muerto.

– Se acabó la conexión…, ¡mierda!, pues no pienso pagar otra vez… No me pagan lo suficiente, total, solo es una reseña en el vigésimo aniversario de la operación megaupload… Nada tan importante, ¿quién querría una red donde cualquiera pudiese estar conectado y sin tener que identificarte? ¿quién querría poder intercambiar mensajes sin ser filtrados por el gobierno? ¿quién podría querer disfrutar de cultura sin pagar a los grandes estudios que tan amablemente los han generado?.. Estos chicos de principios de siglo estaban un poco locos.

Acabo de recibir un email, viene de la dirección de contraterrorismo de earthlink, tengo dos horas para explicar mis accesos a informaciones «subversivas» sobre internet y aportar mis credenciales y autorización como periodista… Bueno, otra vez con el dedo en el aparatito, no quiero despertar suspicacias, ya pasé un mes en el trullo por copiar el último libro de Harry Potter y no borrarlo a tiempo del dispositivo… Y eso que no me gustaron las aventuras del anciano mago…

La piratería no es el problema

Piratas

El mes pasado asistí a unos cuantos talleres y presentaciones en el FICOD (Feria internacional de contenidos digitales), además de un nivel importante en los invitados (abría la feria Tim O’Reilly) se trataron temas muy, pero que muy interesantes para cualquiera que pretenda tener presencia en el mercado de contenidos digitales. Os recomiendo que os apuntéis a la próxima (si es que hay próxima, con esto de los recortes).

Una de estas reuniones tenía el sugerente título de : «¿Cuál es el precio que los usuarios
están dispuestos a pagar por los contenidos digitales?
» y además había recibido una invitación, huelga decir que me presenté allí y ocupe una de las escasas sillas (mucha gente se quedó de píe). El informe que nos presentaron os lo podéis descargar aqui pero el análisis subyacente es bastante sencillo: La gente está dispuesta a pagar por contenidos digitales de calidad… Eso si, bastante menos que por sus homólogos físicos. Vamos, que quiere pagar menos por una descarga de película que por el dvd correspondiente y lo mismo con los libros, cosa lógica, por otra parte, si tenemos en cuenta que los costes de replicación y distribución tienden a cero en estos casos. Veamos una gráfica esclarecedora del informe:
Usuarios dispuestos a pagar en relación a los que descargan o reproducen on-line
En ella vemos como casi todos los que se descargan videojuegos (los hombres) están dispuestos a pagar y que todos los que descargan cualquier cosa, mayoritariamente querrían pagar por ello.

El informe también incluía otra gráfica con el precio que los usuarios estarían dispuestos a pagar por cada tipo de contenido y oscilaba desde los 2,5 Euros de una reproducción de serie de catálogo a los 14,65 por la descarga de un videojuego, pequeños, pero suculentos ingresos si los multiplicamos por los «millones de piratas» que la industria nos muestra día si y día también.

El estudio ahonda bastante más en muchos aspectos relacionados, como las características más valoradas a la hora de descargar o las perspectivas de los diversos mercados en cuanto a la distribución de medios digitales. Os recomiendo que os lo leais si tenéis un rato. Cuando terminó de exponernos el informe, quedé sorprendido porque la mayoría de la gente de mi alrededor asentía satisfecha por que alguien, por fin, les contaba cosas que todos podíamos entender. La pregunta obvia era, ¿y porqué la industria no quiere distribuir en digital? Dado que en FICOD había muchos afines a la literatura (entre ellos yo), alguien hizo la pregunta en alto ¿por qué las editoriales Españolas no aprovechan este filón digital?

Uno de los presentes, que era un editor ya entrado en años dijo que el negocio de venta de libros en digital era ruinoso, que no se vendía nada y que no se recuperaban los costes de la conversión y echaba la culpa a la piratería de ello… ¡no se puede competir con lo gratuito!… Este argumento, repetido hasta la saciedad se mostraba tan fuera de lugar ante el informe que habíamos escuchado que la discusión posterior adquirió un tinte de «sana indignación» por los autores y lectores que nos encontrábamos alllí.

El hecho es que la industria editorial española no ha tomado el pulso a la venta digital. Mientras que Amazon en EEUU vende un millón de kindles a la semana y vende muchos más libros digitales que en papel en España apenas se venden unos pocos miles de ejemplares por las paupérrimas plataformas Libranda o por independientes como publidisa.. ¿No hay demanda? No, no hay oferta. El catálogo disponible en digital es pequeñísimo, además, lastrado por un DRM caro y pesado y por esquemas de distribución heredados de la epoca del papel. Amazon, nada más llegar a España, ya está vendiendo libros digitales y, a buen seguro, ya ha vendido muchos más que Libranda.

Como diría Mourinho ¿por qué?… ¿Porqué los editores están regalando el negocio de la distribución digital al gran monopolio Americano?

La respuesta la obtuve días más tarde hablando con un librero (que vende por internet) y me lo dijo muy claro: Si de este libro se venden 5.000 ejemplares, sacando un beneficio X, para que el mismo libro en digital diese el mismo beneficio deberían venderse 50.000, y no hay suficientes lectores con suficiente tiempo para leer todos esos libros. Como las editoriales quieren seguir teniendo los mismos beneficios, pues claro, apoyar el libro electrónico se hace contraproducente.

En resumen: los que tienen que generar la oferta han decidido voluntariamente no generarla. La demanda, por su parte, no deja de crecer según se van vendiendo más y más lectores y tablets. Si la industria habitual no proporciona el producto que se demanda al precio que se cree adecuado lo lógico es que se busquen otras vías… Y esas vías, si señores, pasan por la descarga gratuita… Y es que, nosotros queremos pagar, pero si no es posible, como dice un amigo mio… haremos el mal.

Y si, además, hacemos limpieza del panorama artístico (como con la retirada voluntaria de Lucia Etxebarría), pues mejor que mejor.

SGAE, a todo cerdo…

El sábado pasado, asistí al excelente concierto de Joaquin Sabina en Gredos. Como telonero (o algo similar, uno nunca sabe) apareció Andrés Calamaro y la única vez que abrió la boca para dirigirse al público que había pagado la entrada y se había desplazado unos cuantos kilómetros para ver el espectáculo dijo algo tan tonto como: «Yo también soy autor: Bautista, estoy contigo».

Evidentemente esto no nos gustó a muchos de los que allí estábamos y se lo agradecimos con una sonora protesta. El Kalamardo no volvió a dirigirse a nosotros en todo el concierto más allá de las letras de sus canciones.

Esta introducción sirve, más que nada, para que se pueda ver la actitud que han tomado algunos beneficiarios de la SGAE y sus peores prácticas ante la evidencia de que la gestión de su presidente no ha sido todo lo honrada que debía. Calamaro ha mostrado su apoyo incondicional, incluso comparando la detención del capo con el 23F. Alejandro Sanz defiende a Bautista y llamó «cortitos, rabiosos y oportunistas» a todos los usuarios que estaban dejando posts contra la SGAE en twitter. La ministra de cultura no deja de apelar a la presunción de inocencia cuando, por contra, se elimina esa presunción con su famosa ley y se permite cerrar páginas sin que un juez entre a valorar si hay delito alguno.

El resto de reacciones, las consabidas. Los politicástros echándose los trastos los unos a los otros, los afectados, que no olvidemos al fin y al cabo que estamos hablando de un desvío de fondos que, en lugar de ir a los autores han ido a los bolsillos de otros amiguetes, ni ven, ni oyen ni dicen nada más que obviedades. También se ha apuntado algún que otro payaso a la fiesta, más que nada por ver si cae algo…

Parece que las evidencias que se tienen en contra de la SGAE y sus prácticas para desviar dinero son bastante sólidas como para que judicialmente el caso siga adelante. Lo que tenemos que pensar es cómo ha sido posible que una entidad que recauda un impuesto encubierto (el canon) y que reclama como suya la propiedad de toda la música tenga libertad, no solo para hacer y deshacer a su antojo en elecciones, repartos, recaudaciones sino que además, no pueda ser auditada por nadie (salvo sus auditores privados que nada pueden aportar en estos hechos).

Esperemos que estas detenciones propicien una refundación de la SGAE, una llamada de atención sobre el sistema de recaudación de la compensación por copia privada o, incluso, si hay suerte, sobre la influencia de los lobbies de la industria en el gobierno.

Y yo estaría gozoso si, por ende, alguien entra a discutir el concepto de «propiedad intelectual» y empezamos a eliminar privilegios innecesarios en nuestro mundo actual.

La ley «sinde», la guerra continúa…

sinde a por internet

Como todos debéis saber ya, la ley sinde ha sido derrotada en el congreso, no sin un cierto tufillo de chantaje político, más que preocupación por la ciudadanía, que, de forma excepcional estaba levantada en armas en su parte más digital. Como muchas de mis amistades me han preguntado por el asunto, y ya van unas cuantas veces que repito los mismos argumentos, aquí os dejo mis reflexiones sobre el tema:

¿Qué es la ley «sinde»?

En Diciembre de 2009 y dentro del proyecto de ley denominado LES (Ley de Economía Sostenible), de manera sorpresiva y sin aviso previo se incluyó un apartado, la disposición final primera, que tenía como fin, según sus promotores evitar que existan sitios web que se lucren con las creaciones culturales sin pagar derechos por ellas.

El texto integro de esta disposición final primera (en adelante ley sinde para nosotros) lo que especificaba era la creación de un órgano administrativo con capacidad de decidir, ante denuncias de interesados, la ilegalidad de unos sitios webs y proceder a su clausura o bloqueo. Este texto, que no contemplaba ninguna garantía judicial para el denunciado, fue ampliamente contestado por muchos internatutas, que confeccionaron El manifiesto en defensa de los derechos fundamentales en internet, que fue respaldado por más de 200.000 personas y provocó que el ministerio de cultura convocara una reunión para explicar la ley a los descontentos. Sin embargo, la explicación no consiguió más que confirmar las dudas que existían sobre la ley.

Después de comprobar que la ley en su primera redacción no nombraba para nada al poder judicial y, por tanto, dejaba en manos de la administración el cierre de cualquier web, lo que podía conculcar los derechos fundamentales de información y ser declarada inconstitucional, decidieron reformarla (maquillarla, más bien) para que apareciera la figura de un juez por algún sitio. E introdujeron una disposición en la que antes de cerrar un sitio web la comisión debería consultar a un juez, en un plazo brevísimo, si dicho cierre conculcaba alguno de los derechos fundamentales… Es decir, aparece un juez para que de su permiso a proceder al cierre, pero sin entrar a valorar si existe delito o no, solo se le pregunta, y sin posibilidad de realizar un proceso de indagación adecuado, si el cierre de dicha página web conlleva una violación de derechos fundamentales (para evitar que se cierre la web de un periódico, por ejemplo).

Llegados a este punto, ya que la ley sinde no se modificó más, el significado resumido del funcionamiento es el siguiente:

  • Existirá una comisión formada por miembros elegidos a dedo (lo dictará un reglamento no escrito todavía) y que puede incluso incluir personas de la industria cultural.
  • Alguien de la SGAE, promusicae, Sony, o quien sea, denuncia una página web que cree que está perjudicandoles «patrimonialmente»
  • La comisión cursa la denuncia, amenza a la web con cerrarla si no retira el contenido incómodo y si a la cuenta de tres no ha doblado la rodilla, procede a solicitar el cierre de la web
  • La comisión pregunta a un juez si el cierre de esa web atenta contra los derechos fundamentales (sin entrar en la cuestión de si es ilegal o no su contenido) y en cuatro días tiene una respuesta (positiva siempre, salvo que intenten cerrar un medio de comunicación establecido)
  • Se cursa ordenes a los operadores de internet y/o hosting que albergan el sitio web y se cierra el mismo

Entonces.. ¿Qué está mal?

Hasta aquí todo parecería normal, es decir, Sony quiere cerrar seriesyonkies porque cree que le está perjudicando y en cuatro días la web cerrada… Pero ¿qué problemas hay en esta ley?

  1. Las actividades de seriesyonkies, o la web de enlaces que sea, no son ilegales, como se puede ver, por ejemplo, aqui. Es decir, según la legislación española no está haciendose nada ilegal en esa web y, sin embargo, se está procediendo a su cierre. Es decir, nos estamos saltando el poder judicial y dejamos indefensos a los adminstradores de webs.
  2. No está establecido en ningún sitio el tipo de cosas que se pueden denunciar en pos de la «protección de la propiedad intelectual«, por lo que igual cerraremos seriesyonkies o la web del congreso por utilizar una foto sacada de internet, o lo que es peor, cualquier sitio puede haber citado a cualquier otro autor y procederse a su cierre sin ninguna garantía judicial. Esto tiene una vertiente muy peligrosa… Que se convierta en un mecanismo de censura.
  3. La Ley de Propiedad Intelectual Española ya existe y, si alguien comete algún delito contra esta ley, se le puede denunciar como cualquier otra actuación ilegal en nuestro pais, un juez entrará a dilucidar si se ha incumplido la ley y si existe delito, por tanto, no es necesario hacer otra ley para ello.

Y ahora entremos en el fondo del asunto… ¿Cómo hemos llegado a esto?

Según nos aporta la lectura de algunos cables de wikileaks, el gobierno de EEUU ha estado presionando al gobierno Español intentando que nuestra legislación se endurezca para intentar proteger sus intereses. Unido a esto, vemos que los «productores culturales» siguen empeñados en vendernos productos caducos y que no nos interesan (CDs, DVDs, etc.) y que no han encontrado una manera de satisfacer una creciente demanda de usuarios que pretenden disfrutar de estas creaciones sin salir de casa, sin comprar un soporte caro y sin tener que moverse al videoclub…

Generalmente los mercados se autorregulan, es decir, si surge una demanda, surgen productores que la satisfacen, en el caso de las industrias culturales, aunque la demanda se ha detectado, utilizan su posición de monopolio favorecido para seguir vendiendo lo mismo de siempre, donde obtienen más beneficios y donde se sienten más cómodos… Sin embargo, ante la falta de oferta, la gente se suele organizar para cubrir sus necesidades lo mejor posible. Si en tu pueblo no venden el coche que quieres te vas a la ciudad más próxima para adquirirlo. Si no lo encuentras en ningún sitio, te desesperas y lo intentas comprar de segunda mano… Algo así ha pasado en internet. Cuando nos dimos cuenta de que no podíamos meter nuestros flamantes CD’s en los reproductores musicales de mp3, buscamos donde encontrar los archivos, pagando primero y luego cuando se vio que no existía tal oferta, pidiéndoselo prestado a nuestro primo, vecino o aquel que conocimos en un foro de internet (la copia privada está permitida por nuestra legislación). Si nos damos cuenta que los vecinos, primos y usuarios de foros de internet son millones, pues nos plantamos en un sistema P2P que deja fuera del sistema a los productores musicales…

¿Y qué hicieron estos productores? ¿sacaron un sistema legal de acceso a su fondo musical para satisfacer la demanda? Nooo, decidieron acusar y perseguir a sus clientes como si estuviesen haciendo algo malo. En EEUU, con leyes en vigor mucho más restrictivas consiguieron ganar algunos casos, cerrar empresas como Napster y labrarse una fama pésima… Y los usuarios siguieron descargándose música que no podían encontrar en otro sitio. ¿Aprendieron la lección? Algunos si, Apple decidió tomar la iniciativa que no tomaron las discográficas y abrió iTunes, y ahora vende más música que nadie y toda digital. Igual es que ofrecía a sus clientes lo que sus clientes estaban demandando… Lo mismo con spotify, que aunque no ofree unos resultados financieros buenos, si que ha conseguido cientos de miles de suscriptores que pagan por escuchar la música que quieren cuando quieren.

En España, las discograficas, productoras cinematográficas, editoriales literarias y cualquier otra industria musical, han seguido cerrando los ojos y rezando para que esto de internet se acabe… Ni se han planteado que su campo de acción deba cambiar, ni se les ha pasado por la cabeza que el lugar para vender sus productos sea en la red de redes ni que sus clientes más fieles preferirían que se les ofreciese sus productos en casa y sin depender de transportistas, horas de recogida ni dependientes ni stocks… Y gritan a los cuatro vientos que los que se descargan sus obras por internet son «piratas» y cobran un canon por cada dispositivo en los que grabo mis fotos de verano por si se me ocurriera grabar sus productos en su lugar y pretenden hacernos creer que somos ladrones… Y su último recurso es «legalizar» la persecución a aquellos que ponen en contacto a los usuarios que se prestan las películas o las canciones, creyendo que eso les dará tiempo para decidir qué hacer con internet, o mejor aun, intentar que cierren internet y todos volvamos al cine, compremos CDs (o mejor, vinilos) y lancemos nuestro lector de libros digitales a la basura.

¿Me siento mal descargando películas de internet? No, me siento mal sabiendo que no puedo pagar a sus creadores porque los jefes de sus distribuidoras no se atreven a poner un netflix en España… Quizá deberían legislar menos y trabajar más en cambiar su modelo de negocio.

Y por eso, espero y deseo como ciudadano de este país que la ley sinde no prospere… Por ello la guerra continúa. Es una guerra entre ciudadanos y grupos de presión, entre «creadores» que desprecian a sus admiradores y fans incondicionales que harían lo que fuese para ver a sus ídolos. Una Guerra que dará la talla democrática de España y, en parte, su soberanía legislativa.

WikiWars

Wikipedia no es libre

Perdón por el título tan extraño, pero es que es una etiqueta que llevo tiempo teniendo en mi mente y he creído que ahora era un buen momento para usarla, os explico por qué:

Como ya os he contado, estoy enfrascado con un proyecto que a mi me ilusiona mucho: biblioeteca. llevo cerca de un año dando vueltas a la idea, programando, haciendo planes de negocio, creando empresa, haciendo promoción, etc. Eso me quita una gran parte del día, pero al final estoy seguro de que se verán los resultados (si conseguimos resistir las vicisitudes iniciales). El caso es que comentándolo con un amigo, me sugirió que crease una entrada en la wikipedia para el servicio. Es algo muy normal que no se piense en wikipedia mientras estás en medio de la vorágine del lanzamiento de un proyecto, pero anoté la sugerencia.

Pasado un tiempo, después de aparecer en numerosos medios de comunicación y de tener una base de usuarios de cerca del millar me animé a escribir la entrada. Es cierto que tenía la cuenta creada como yoprogramo desde hace tiempo (2009), aunque no había participado en ella, sino en la wikipedia en inglés… Porque nunca había considerado interesante nada de lo que podría haber incluido en ella. Así que decidí ir con la verdad por delante y usar mi cuenta para crear la flamante página nueva de BiblioEteca en la Wikipedia… ¿Quién mejor que uno de los fundadores para crear esta página?

Y ahí empezaron las WikiWars…

Primero se calificó el artículo como promocional… Dado que tenía una sección de «BiblioEteca en los medios» y que el lenguaje parecía ser poco adecuado para la wikipedia. Se proponía su borrado por spam. Mi reacción, lógica, fue pedir consejo para mejorar el artículo, completarlo con más referencias y hacer que el lenguaje fuese neutral… En parte lo conseguí, no sin reticencias del bibliotecario que se encargó. Podeis ver la subrealista discusión en estos dos enlaces (si, las discusiones en la wikipedia suceden en las páginas de discusión de los usuarios y sin poder ver el dialogo completo): El malvado bibliotecario( y 2), yo intentando mejorar la página.

El caso es que, finalmente, se convenció de que no merecía el borrado y lo dejó en un cartel de advertencia… Pero eso si, avisó a otro colega (el editor escoba) que se dedicó a cuestionar la relevancia de la página. Según su mismo registro de actividad, este usuario ultimamente se dedica a borrar sin misericordia cosas de la wikipedia. Llegado este punto, intenté razonar sobre la razón por la que es relevante algo como Ballance (un jueguecito de PC desconocido) y no nuestro servicio… Intentos futiles, ya que las comparaciones no son argumentos y esa es la máxima de los wikipedistas en Español (el pasado es pasado y el futuro es lo que yo te diga): las comparaciones no sirven y los argumentos tampoco.

Las razones fueron discutidas por arriba y po debajo, la conclusión es que mi usuario no podía escribir el artículo por estar relacionado con lo que se describía (!!!!) Bueno, pues encarguemos a otro que lo haga… dicho y hecho, el usuario JAEandTheBooks apareció al rescate, utilizando otro ordenador de mi oficina, pero con las mismas ganas de colaborar… Pero tampoco, daba igual la cuenta desde la que se escribia ni lo que se escribía, argumentar es cansino y los wikipedistas ciegos del todo.

Ante el contraataque de JAEandTheBooks, salió otro supuesto usuario (Martinmartin) que, obviamente y al igual que los anteriores no se digna ni poner cual es su nombre… Pero eso si, tiene una opinión más importante que la mia. Solo escribe sobre un tema (difícil que no esté involucrado en él o que sea imparcial) y solo desde un punto de vista… Y además se enfada si le preguntas porqué el si puede hablar de un solo tema sin acusarsele de ser parcial y los demás no podemos. Visto que se queda sin argumentos ni razones para demostrar la irrelevancia del tema, deciden acudir a otro bibliotecario y lanzan una Verificación de usuario sobre yoprogramo y JAEAndTheBooks…

Y el resultado final: La página borrada y los usuarios suspendidos. ¿por qué? por usar la IP de la oficina y por argumentar en contra de la irrelevancia de algo. Encima, el borrado de la página tiene como motivo el «abuso de títeres», ni la irrelevancia ni el spam. Cosas las 3 completamente falsas y, obviamente, subjetivas.

Pero alguien ha vuelto a crear la página de nuevo… Es lo que tiene que sea un wiki.

Como conclusión para mi, ha quedado una sola: La wikipedia en español no es libre, ni permite que se le lleve la contraria a nadie, ni tiene ningún interés en el contenido que alberga, se limitan a darse premios entre ellos y a mantener alejados a todos aquellos que podrían generar contenidos modernos e interesantes y a decidir lo que se publica en base a quien lo publica, no a lo que se cuenta ni a las referencias que tenga… Una decepción para todos aquellos que confiábamos en la iniciativa y una demostración más del fracaso de la internet 1.5. Ni las mafias de meneame, oiga.

Y es que, como me dijo uno de los usuarios censores: «la wikipedia no es una democracia«.

ACTUALIZACIÓN 1: La página que se creó ayer ya ha sido borrado por otro editor poniendo como razón «recreación de una página borrada»… Y yo sigo sin entender cómo un editor me dice que si se espera lo suficiente cualquier otro podrá crear la página más tarde cuando sea relevante y va otro detrás y me borra la página… ¿Será que les dan puntos por quitar información de la enciclopedia?.

ACTUALIZACIÓN 2 : Parte de la discusión sobre la página se ha salvado. Podeis verla en Discusión sobre página BiblioEteca.

ACTUALIZACIÓN 3 : Alguien había vuelto a crear la página y no solo la han borrado sino que la han bloqueado por «vandalismo» promocional. El malvado bibliotecario ataca de nuevo!!!