Parando un ciberataque a tu wordpress

Este lunes, a eso de media tarde, detectamos en la web de uno de nuestros clientes que estaba recibiendo una cantidad inusualmente alta de intentos de login fallidos. Nuestro cliente, que usa wordpress, tiene un cierto nivel de visitas digamos, importante, lo que le hace un blanco para bots y escaneadores de redes habitualmente, por lo que siempre recibe cierta cantidad de estos intentos fallidos, pero al cabo de unos minutos nos dimos cuenta de que esta vez era distinto… Estabamos en medio de uno de los mayores ataques a sitios wordpress de la historia. Este es el volumen que mostraba wordfence (el plugin de seguiridad que usamos):

Como vemos se llegaron a los 10 millones de ataques y, como dicen en su blog se trataba de un ataque distribuido masivo de fuerza bruta muy importante. De hecho indicaban que:

  • El ataque había llegado a 14.1 millones de ataques por hora.
  • El número toral de IPs involucradas fueron más de 10,000.
  • Se estaban atacando más de 190.000 sitios WordPress por hora.
  • Esta es la campaña más agresiva que nunca hemos visto por volumen de ataques por hora.

La razón que proponían como posible fuente de este ataque fue el filtrado masivo de credienciales que salió a la luz el 5 de diciembre y que dejaba expuestos millones de contraseñas nuevas que poder utilizar en un ataque de este tipo.

Así que, en medio de toda esta vorágine y recibiendo un montón de alertas, teníamos que hacer algo para proteger nuestro sitio, manteniendo el servicio y evitando que los chicos malos se nos colasen hasta la cocina.

Además de tomar las medidas habituales, nosotros escogimos un camino que nadie más podía tomar, utilizar el nuevo plugin wordpress de nomorepass que acabábamos de desarrollar y que todavía no estaba distribuido (ahora ya lo está) y que contenía una nueva opción más que interesante: «Solo permitir el acceso mediante la app».

Con esta simple opción aunque los robots consiguieran un usuario y un password válido para el sitio no podrían entrar, porque solo se permitiría entrar a aquellos que usaron el código qr y la app para enviar sus credenciales. Esta simple medida, junto con el baneo de ips y otras medidas habituales consiguieron devolver la normalidad al sitio y, sobre todo, estar seguros de que no se podían haber colado.

Como ya os he contado muchas veces, la mejor contraseña es la que no conocemos, así evitaremos todos los ataques por ingeniería social y estaremos un poquito más seguro sin tener que cambiar – todavía – la infraestructura de acceso a nuestros sitios.

Por todo ello,  os recomiendo usar nomorepass.